¡Los árboles son sagrados!: La cara oculta de la deforestación en Colombia

Una ONG dedicada a la conservación de la Amazonía siembra de árboles de la mano con la comunidad indígena de Tayazú.

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Todo árbol es sagrado, foto cortesía

Los árboles regulan la fertilidad, dan cobijo a los animales, regulan la fertilidad del suelo y son vitales para combatir la crisis climática. Como su fuera poco son muy útiles porque adsorben los gases efecto invernadero. Sin contar que para comunidades indígenas y ancestrales son un tesoro sagrado y muchas veces tiene propiedades curativas.

Por esta razón, se han generado diferentes estrategias ambientales para cuidar el Amazonas y algunas de ellas tienen en cuenta lo que significa cada árbol plantado para una comunidad indígena. Para la cosmogonía indígena amazónica, uno de los principios básicos es negociar con los seres sobrenaturales, un acto de intercambio en el que todo lo que ofrecen será compensado en igualdad de condiciones. 

En este sentido, según el informe de la ONU: «El área forestal del planeta continúa disminuyendo, el mundo ha perdido 178 millones de hectáreas de bosques desde 1990. Sin embargo, el ritmo de deforestación se ha reducido significativamente entre 1990 y 2020 por la disminución de la tala en algunos países».

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Campaña Salvemos el Amazonas

Ante esta situación, Agrocampo, el único hipermercado agrícola de Colombia en alianza con el programa Saving the Amazon decidieron aportarle al cuidado del medio ambiente, por medio de la campaña  Salvemos el Amazonas. Este programa involucra grupos indígenas como La comunidad de Tayazú, que ha estado acompañado la siembra de 501 árboles.

Esta comunidad pertenece a la etnia Wanano y está ubicada a tres horas de Mitú, los árboles fueron sembrados en el Gran resguardo indígena de Tayazu en Mitú. Sus habitantes han luchado durante años contra la deforestación, son conscientes que esto trae consecuencias ambientales e impactos negativos.

Los árboles plantados por esta etnia, se llama Molinillo, es un árbol de la familia de desde allí decidieron aportarle al cuidado del medio ambiente, por medio de la campaña  Salvemos el Amazonas. Esta especie puede alcanzar de 18 a 35 metros de altura y de 50 a 70 cm de diámetro, además es exclusiva de Colombia y se distribuye en el valle geográfico del río Cauca desde 1.700 hasta 2.600 msnm en las zonas de vida bosque húmedo.

La comunidad de Tayazú es experta en construcción ancestral y apreciados por las comunidades vecinas por a sus viviendas y malocas donde se combina lo moderno y lo ancestral. Por lo cual, cuando la deforestación amenaza a estas comunidades, también destruye su historia, sus costumbres y su legado.

Con información de Saving the Amazon y Agrocampo.

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