Judicial

Terror se ha vivido en las últimas semanas en el barrio Santa Isabel, en Girardot, pues esta parte de la localidad ha sido escenario de dos hechos de sicariato que atemorizan a la comunidad.

El caso más reciente se registró en la noche del sábado 5 de diciembre, por una de las vías más transitadas de este barrio y donde se encuentran varios establecimientos comerciales.

Según testigos, alrededor de las 9:20 de la noche, una serie de detonaciones y un fuerte estruendo alteraron la tranquilidad de los habitantes del sector.

Se trataba de un ataque sicarial que ocurrió mientras la víctima se transitaba a bordo de su motocicleta, y a pesar de ser trasladado a un centro asistencial no pudieron salvarle la vida.

Los hechos

Según testigos, alrededor de las 9:20 de la noche del sábado 5 de diciembre, un hombre que se movilizaba sobre la calle 25, vía principal del barrio Santa Isabel, en una motocicleta marca AKT color negro, fue sorprendido por un desconocido, quien lo interceptó en otra motocicleta, tomándolo por sorpresa por la espalda.

Sin mediar palabra con los vehículos en movimiento, luego de apuntarle a la cabeza accionó el arma en repetidas ocasiones, haciendo que la víctima perdiera el control y terminara chocando contra un carro que se encontraba parqueado frente a una vivienda, luego de lograr su cometido el pistolero escapó con rumbo desconocido.

Momentos de pánico vinieron muchas personas que departían en varios establecimientos comerciales aledaños a la manzana 2 del mencionado sector, cuando cesaron los disparos la comunidad salió a mirar qué había pasado y se encontraron con el cuerpo de un hombre tendido sobre el pavimento, en medio de un charco de sangre, aún con su casco puesto, siendo auxiliado rápidamente por varias personas que lo trasladaron en un taxi a un centro asistencial del municipio, donde lamentablemente llegó sin signos vitales.

Investigación

Según fuentes oficiales, esta persona fue identificada como Darwin Hernando Omaña Ayala, quien fue impactado en tres oportunidades, los proyectiles que ingresaron en su cuerpo comprometieron órganos vitales que finalmente provocaron su muerte. Se conoció que este joven de 23 años, era oriundo de Cúcuta, pero vivió en el municipio de Flandes.

Los hechos que rodearon este cruento asesinato, son materia de investigación por parte del grupo de homicidios, quienes analizan las cámaras de seguridad de algunos establecimientos en busca de pistas que permitan dar con el paradero del responsable.

^{Redacción Extra Girardot}