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Un hombre que mandó a quemar a su novia con ácido, en un hecho que ocurrió el pasado 13 de noviembre a la salida de una estación del sistema masivo de transporte TransMilenio, y que fue cometido por dos mujeres, se quitó la vida, ante la fuerte evidencia de las pruebas que lo incriminarían en esta brutal agresión.
La investigación efectuada por efectivos de la Sijín, tras 80 horas de material audiovisual recopilado de las cámaras de seguridad del sector, permitió individualizar a las atacantes, quienes 'desenredaron' la trama y dieron a conocer los verdaderos motivos de este ataque, en la que resultó gravemente lesionada la joven de 21 años.
De película de terror
La víctima se encontraba a la espera de su pareja sentimental, con quien se movilizaba en moto. En las primeras acciones adelantadas por la Policía se logró establecer que días antes de la acción delincuencial había recibido mensajes amenazantes provenientes de dos números telefónicos, los cuales fueron analizados por las autoridades judiciales.
Sin embargo, en el primer relato rendido por la mujer atacada, se pudo establecer como principal sospechoso a su pareja sentimental, teniendo en cuenta que, durante el transcurso de la relación se habían presentado episodios de celos, agresiones verbales y psicológicas.
Además de situaciones relacionadas con la salud mental del hombre, quien por esta condición habría estado ingresado en una clínica especializada.
Tres días después de lo ocurrido, el primer implicado al parecer decidió confesar lo acontecido a la familia de su novia, a quienes les sostuvo que su hermana y su pareja sentimental, también mujer, estaban relacionadas con lo sucedido y que todo habría originado por los malentendidos vividos como pareja.
Así se descubrió todo
En ese instante, una de las mujeres contactó a los investigadores, al tiempo que aportó una conversación en la que la señalada agresora asumió los hechos, pero manifestó que todo habría sido orquestado por su hermano, quien escudó su comportamiento en un aparente escarmiento a su novia por lo ocurrido en su relación.
Asimismo, la mujer habría confesado que los mensajes amenazantes que había recibido la víctima habrían sido escritos por su hermano, quien consiguió dos Sim Card y presuntamente lo hizo para poder transportarla hasta su trabajo y permanecer enterado de sus movimientos.
En ese momento, se conoció que la persona que habría entregado el ácido era el hombre, quien además le contó a su hermana la ropa que llevaba puesta la víctima y que la iba llevar a la Estación General Santander, en donde permanecería sola en la moto.
Sin embargo, quien finalmente arroja la sustancia fue otra mujer, identificada como la pareja sentimental de la cuñada de la joven atacada.
Se quitó la vida
No obstante, esta investigación tomó un giro dramático, pues el hombre que confesó ante la familia de su novio la acción decidió quitarse la vida, dejando una carta en la que pide perdón.
Al tiempo, y con las pruebas aportadas, entre las que se cuentan testimonios y análisis de videos de cámaras de seguridad del sitio donde ocurrieron los hechos, se logró la captura de las implicadas, a quienes les dieron medida de aseguramiento procesadas por el delito de ataque con agente químico y/o ácido, que podría darles hasta 25 años de cárcel.